La selección de ropa de cama así como el estilo en que se tienden aporta un efecto inmediato en la estética de la habitación, y que dicho sea de paso es un aspecto muy importante; y también existe otro aspecto de gran importancia que debe ser foco de tus elecciones y nos referimos al confort y la experiencia de descanso que se obtiene al ser arropado con el conjunto de estas prendas noche a noche.
Al vestir la cama instantáneamente buscamos que se vea linda, y es momento de dar el peso correcto al descanso que obtenemos en ella. Afortunadamente tanto estética y buen descanso pueden convivir perfectamente en tu cama y por lo tanto en tu habitación, no es necesario descuidar ningún aspecto cuando estés diseñando tu santuario de descanso.
Materiales naturales: la premisa de la cama perfecta.
Nada como experimentar la frescura natural y tacto suave del algodón en unas sábanas o como sentir la transpirabilidad, lo esponjado y abrazable que son los rellenos de pluma natural ya sea en una almohada o en un edredón.
Elige prendas confeccionadas a base de estos materiales naturales, es superior el desempeño que tienen, tanto textiles como rellenos; no debemos perder de vista que estas prendas son las que están en contacto directo con nuestro cuerpo y con nuestra piel varias horas, son responsables de la sensación de naturalidad y confort que favorecen a nuestro buen descanso.
No se trata de tener demasiadas opciones, sino de contar con las prendas correctas que te permitan combinar, adaptar y asegurar que tu cama va a ser confortable en todo momento, sea la época del año que sea, por ejemplo:
1 Juego de sábanas de algodón
1 Funda de edredón, el famoso Duvet.
1 Relleno edredón esponjado, ligero y de 4 estaciones.
No necesitas más, con una selección así es suficiente para combinar y adaptar tu cama, ya sea por color o por tipo de textil, busca los contrastes en puntos específicos como las fundas de tus almohadas o en el pie de cama; o bien, escoge que todo sea del mismo material y color, este efecto de uniformidad y limpieza que obtienes del ‘blanco sobre blanco’ estimula los estados de relajación de manera natural.
Prendas multiusos: un coverlet, una frazada o una manta.
Lo que pasa con este tipo de prendas es que se les considera como ‘un detalle’; y la realidad es que estas prendas de “acompañamiento” pueden tomar tal protagonismo cuando se usan para tender enteramente la cama, vistiendo y aportando una capa extra de confort; particularmente cuando se tiende un coverlet, ya que este aporta gran contraste al tener una distinta textura, lo que provoca que el carácter de la habitación sea otro automáticamente y enriquezca la composición de la cama.
Utilizar sobrecama es muy práctico porque además complementan perfectamente tus horas de lectura por la tarde o si acostumbras realizar una siesta.
También puedes doblarla para que quede tendida como una franja en la parte baja de la cama o buscar que cubra la mitad de la misma, ¡los estilos son muchos!
Las almohadas que se acoplan a ti (y no tú a ellas)
La almohada correcta es aquella que te hace dormir con una postura correcta. La tarea es buscar una almohada que se acople a ti, date el tiempo de recapitular tus hábitos en la cama cuando vayas a elegir la tuya, considera tanto tu complexión física como tu posición preferida de descanso.
Invierte en un buen par de almohadas que sean confortables y duraderas, como dato curioso es que tan solo después del celular, la almohada es el objeto con el que pasarás la mayor cantidad de tiempo horas a lo largo de tu vida, vale la pena concientizarlo.
Tip: Para lograr el confort deseado es necesario que tu cabeza, cuello y columna vertebral estén alineados (tener una posición neutral: sin presión en zonas específicas).
¿Sabías que los colores de la ropa de cama además de influir directamente en tu buen descanso, influyen en la calidad de los tejidos?
Utiliza una gama de colores neutros tanto en tu habitación como en tu ropa de cama ya que esto te ayudará a crear un espacio tranquilo y relajante; puedes utilizar, por ejemplo, grises, marrones, blanco, o una gama de tonalidades pastel. Este tipo de colores evocan frescor, tranquilidad, alegría, limpieza, comodidad, sobriedad y sofisticación. Esta decisión de colores neutros va a ayudarte a descansar mejor porque te inducen a la relajación, suelen ser más acogedores y adecuados, a diferencia de los tonos más estridentes y llamativos.
Además, lo que sucede en este tipo de textiles neutros y/o blancos es que técnicamente presentan un mejor rendimiento; y esto es debido a que durante su fabricación como teñido fueron sometidos a una menor cantidad de procesos químicos, lo cual se traduce en una mayor resistencia.
Tomar las decisiones adecuadas al seleccionar tu ropa de cama parece un reto pero es bastante sencillo, en Vivenda contamos con una propuesta que se adapta a cada gusto, siempre priorizando la calidad y desempeño de nuestros productos para favorecer el descanso que te mereces.
Un dormitorio weirdcore es un espacio donde puedes expresar tu personalidad, con un toque único y personalizado pero lo más importante donde descansar.