¿Percal ó Satín? Diferencias entre estas Telas de Algodón

Tanto el satín como el percal son telas de algodón de alta gama, pero no son iguales. Cada una tiene una textura, un comportamiento y una intención diferente. Saber diferenciarlas es saber elegir el descanso que mejor va contigo.

No todas las sábanas son iguales, y no todo algodón se siente igual.

Todo empieza por la fibra de Algodón

Tanto el percal como el satín están hechos de algodón, pero no de cualquier algodón. En Vivenda usamos algodón peinado de fibra larga, seleccionado por su resistencia, suavidad y capacidad de mantener su estructura con el paso del tiempo.

Pero lo que los caracteriza a las telas, no es la fibra, es el tejido en si, es decir, la manera en que se entrelazan los hilos para conformar la tela.

Tejido y técnica: la diferencia entre Percal y Satín

¿Cómo se siente el Percal o el Satín sobre la piel?

La verdadera calidad se mide en el contacto directo. El algodón, por su origen natural, es hipoalergénico, suave, transpirable y amable con todos los tipos de piel.
Lo que cambia entre percal y satén es la experiencia:

• Percal: una caricia fresca, como una sábana recién lavada al sol.
  Esa sensación nítida y revitalizante, como abrir las ventanas por la mañana y dejar que el aire puro entre.

  
  
  

• Satín: un abrazo suave y continuo, como deslizarse en un sueño.
  Como flotar entre capas de suavidad que te envuelven sin esfuerzo.

Percal y SatÍn: ambos son algodón sostenible

Ambos comparten el mismo origen: algodón responsable, procesado con certificaciones como OEKO-TEX® y sin químicos agresivos.
Pero el verdadero diferencial sostenible está en la durabilidad.

• Un satín Vivenda puede mantener su suavidad por años sin perder forma.

• Un percal Vivenda se fortalece con cada lavado, manteniendo su estructura sin sacrificar confort.

Ambos están diseñados para acompañarte largo tiempo, sin necesidad de reemplazo constante.
Porque lo más sostenible es lo que permanece.

Percal y Satín en proyectos de interiorismo

En decoración, elegir entre percal o satín es un gesto de estilo.

• El percal se integra naturalmente en espacios nórdicos, costeros o minimalistas. Va con lo simple, lo limpio, lo aireado.

• El satÍn, en cambio, realza la estética de lo sofisticado, lo clásico, lo envolvente. Como un detalle de alta costura en el dormitorio.

En Vivenda, ambos se adaptan a las paletas neutras y a los materiales nobles de los proyectos de interiorismo en los que colaboramos: madera, lino, piedra, arcilla.
Porque al final, el textil no es solo un complemento: es un protagonista silencioso.

En Vivenda, no elegimos telas: las curamos

Cada textil que usamos pasa por un proceso de evaluación que va más allá de lo visual. Lo tocamos, lo lavamos, lo combinamos con otros elementos, lo sometemos a pruebas. Solo usamos aquellas fibras que resisten el tiempo, elevan el espacio y hacen que la experiencia del descanso sea auténtica.